martes, 28 de octubre de 2014

Hernia discal

A tod@s nos suena la frase: “Me duele la espalda porque tengo una hernia”, ¿verdad?

Últimamente es un mal muy común en la nueva sociedad que estamos creando, donde las nuevas tecnologías nos avocan al sedentarismo delante de una pantalla, donde gastamos mucha parte de nuestra faceta laboral, pero también lúdica y de entretenimiento, y eso es lo que empieza a preocupar cuando se habla de salud y bienestar.

Una hernia es cualquier órgano o parte de él que sale, de forma natural o accidental, fuera de la cavidad que normalmente lo contiene.

Este es el término general de hernia, cualquier parte que sale fuera de su cavidad, como puede ser una hernia inguinal, umbilical, epigástrica, etc.

Pero mi cometido de hoy es referirme a lo concerniente a la Hernia Discal, es decir a la que se produce en el disco intervertebral.

Entre cada una de nuestras vértebras existe una estructura que se denomina Disco Intervertebral, éste es el responsable del sistema de amortiguación de presiones, indispensable para que pueda haber movimiento entre vértebra y vértebra sin que haya rozamiento entre ellas.

Este disco intervertebral está constituido por dos estructuras, una parte central que es como una bolita, como si fuera una canica, pero no dura, tiene una consistencia de tipo gelatinoso, contiene entre un 70% y un 90% de agua, y es el encargado de absorber las fuerzas de compresión entre las vértebras y se denomina: Núcleo Pulposo.

Este núcleo está dentro de la otra estructura llamada Anillo Fibroso, que es como si fueran unos barrotes de una cárcel que están guardando al reo que es el núcleo. Está constituido por un material más consistente, fibras de colágeno, que se sitúan formando varias capas concéntricas en torno al núcleo, cuya misión es no dejarlo salir al exterior.

Este disco es el amortiguador especial que tiene nuestro organismo para absorber la energía que generan las presiones a las que nuestro cuerpo está sometido diariamente, y distribuirlas de la mejor manera para que todo funcione como un buen engranaje.

Al poseer en su composición materiales como colágeno y agua, poseen bastante flexibilidad, el núcleo más y el anillo un poquito menos porque este último debe de soportar un poco más el peso. 

Estos componentes dan la elasticidad necesaria para que se vayan adaptando a todos los movimientos que tienen nuestras vértebras y vayan distribuyendo esas presiones, como he dicho anteriormente, y que podamos movernos sin ningún tipo de problemas.

Cuando el disco está sometido a cargas de compresión, imaginaros, una vértebra se aplasta contra la otra, por ejemplo cuando cargamos con un peso importante, en ese momento se produce una presión en el interior del núcleo que empuja las estructuras circundantes, a esas capas concéntricas que hablábamos del anillo fibroso, las aleja del núcleo, las empuja hacia fuera, ¿Lo veis? 
Esta presión lo que provoca es un aplanamiento y ensanchamiento del disco, aplana el núcleo aumentando su presión interna de manera notable y empuja hacia fuera al anillo fibroso.

Menos mal que hemos hablado antes que los materiales de los que está compuesto son elásticos porque sino, ¡Madre mía! la que se podría montar ahí si cargamos con mucho peso, por ejemplo.

Vamos a imaginarnos que el movimiento que se produce es el de flexión, por ejemplo echamos el cuerpo hacia delante para intentar tocarnos la punta de los pies.

La presión que provoca este movimiento causa tensiones de tracción en las fibras posteriores del disco y de compresión en las fibras anteriores. 
Igual os suena un poco complicado, pero intentad visualizar cómo yo me inclino hacia delante y la vértebra superior se desliza hacia delante, con lo que el espacio intervertebral disminuye en el borde anterior ¿no?  Y eso produce que el núcleo se desplace hacia atrás, de modo que se sitúa sobre las fibras posteriores del anillo, aumentando la tensión del mismo.

Para visualizarlo mejor imaginaros que tenéis una canica entre medio de dos piedras cuadradas, en equilibrio, si intento juntar las piedras por la parte de delante la canica se va para atrás. Pues es lo que os acabo de explicar, ese es el movimiento de flexión.

Si hacemos lo contrario, intentamos juntar las piedras por detrás, la canica irá hacia delante, ese es el movimiento de extensión de la columna, por ejemplo el impulso que coge un tenista a la hora del saque.

Estos son dos ejemplos de dos de los movimientos que ocurren en nuestras vértebras para que veáis, que aunque no nos demos cuenta, nuestro disco está en continuo movimiento, y que durante las actividades de la vida diaria, el disco se carga de una manera compleja y normalmente se somete a una combinación de presiones, no sólo a un tipo de ellas como os he descrito yo, por poneros un ejemplo.

Generalmente nosotros no realizamos movimientos en un solo plano, es decir una flexión pura o una rotación pura, así que las presiones son una combinación de compresión, flexión y torsión, por ejemplo cuando estamos sentados e inclinamos el tronco para abrocharnos la zapatilla de deporte del pie derecho. 

En ese momento mi disco intervertebral está sometido a tres tipos de presiones y está sujetando y amortiguando para que no haya ningún problema y nos podamos ir a jugar nuestro partidito de pádel tranquilamente.

Espero que os haya quedado más claro el significado de hernia discal.

Gracias por estar ahí.
PILARTES
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